La cesta de setas

Aunque aún no ha acabado el verano, con las últimas lluvias, hay zonas en las que ya empiezan a aparecer las primeras setas.

Nosotros hemos pasado un fin de semana increíble en Meranges, un pueblecito de la Cerdanya, a 1.590 metros de altura, en el que los niños han disfrutado muchísimo en la montaña cogiendo sus primeras setas.

Pero ojo porque hay setas que no son comestibles y podrían darnos un gran disgusto. Para que esto no ocurra y todos disfrutéis en familia, ahí van cinco consejillos:

1. Si eres novato o principiante, haz las primeras salidas con personas que sepan reconocer bien las setas comestibles y que conozcan el terreno.

2. Si tienes duda, no la cojas, vale más venir con la cesta vacía.

3. Normalmente las setas más bonitas y de colores llamativos NO SON COMESTIBLES. Son ideales para sacar unas fotos con los Sonny Angel, pero no para nuestra cesta de setas.

4. A los niños les hace muchísima ilusión encontrar setas, así que si ves alguna buena, dirígeles y deja que sean ellos quienes la encuentren.

5. Inculca a los niños el respeto a la naturaleza, a los animales y al entorno, se puede pasar una bonita tarde en el bosque haciendo un picnic, pero nunca dejaremos allí basuras ni residuos.

Y esta ha sido nuestra cesta de setas de la mañana del Domingo. Ahora toca limpiarlas ¡y a cocinar!

Para acabar, os dejo una receta muy fácil de hacer.

CARPACCIO DE CEPS

Sólo tienes que cortar los ceps en láminas finas, salpimentar, un poquito de orégano, un chorrito de aceite de oliva virgen, otro de vinagre de Módena y ya estará listo para comer.

Espero que os haya gustado este post y que disfrutéis de vuestras salidas al bosque.